Preparar el corazón para el Eclipse del 11 de agosto…

Luna y Marte desde Barcelona

Cuando un planeta aparece en el cielo como «caminando hacia atrás» se dice que entra en su fase retrógrada. En estos momentos Marte en Acuario y Mercurio en Leo se han colocado en retrogradación, resulta interesante mirar que justo en el Eje de Eclipse Lunar estos planetas que rigen nuestra voluntad, nuestra energía masculina (Marte) y nuestra mente y mensaje sagrado (Mercurio) sean los que «han recogido» la energía elaborada con el eclipse para marchar hacia atrás, recapitular y obtener el aprendizaje. 

Nuestras sabias culturas ancestrales honraban la posibilidad de ir hacia atrás como un intento sagrado de recapitular lo vivido, de soltar con consciencia e intención para lograr el vacío que es espacio ideal para el milagro de la evolución. Recapitular lo vivido nos ayuda a estar conscientes, y elegir eliminar las partes de nuestro conducir que ya no vibran en la próxima espiral.

MARTE EN ACUARIO: EL GUERRERO VISIONARIO

Con respecto a Marte, el tema a recapitular será nuestra voluntad, nuestro impulso de innovación, nuestras acciones compulsivas, nuestra necesidad de rapidez e inmediatez, y también el deseo, la pulsión sexual, la violencia como vínculo, los límites, nuestras motivaciones y energía masculina creativa. Por supuesto, también toca recapitular el tema de pareja. Marte retrograda cada dos años aproximadamente, por lo que podemos también sentir que rememoramos lo sucedido desde 2016 cuando Marte inició un ciclo chamánico que culmina el 26 de julio al mismo tiempo que ingresa en Acuario y hace un diálogo con el Sol.

Para recapitular de la mano de Marte (hasta el 27 de agosto estará retrógrado)sobre todo, si lo que necesitamos sanar con urgencia es nuestra energía y pulsión masculina, Acuario nos pregunta ¿Qué sentido tiene estar en comunidad? ¿Cuál es la visión que baja cuando estamos en grupo? ¿Qué pensamientos, emociones y sentimientos necesitamos pulir? ¿Somos pulcr@s en nuestro vínculo con el colectivo y grupo? ¿Cocreamos comunidades saludables o las enfermamos con nuestra envidia, celos e intrigas? ¿Mi visión se expande porque está sostenida por mi coherencia personal o se desmorona ante mi falta de impecabilidad?

Si logramos estar en comunión con el otro, en comunidad y contribuir de formas saludables, los siguientes meses serán un gozo para nuestro matrimonio sagrado interno, pero si estamos inmersas en formas sutiles de violencia en comunidad, si somos un elemento que genera caos en lugar de orden en nuestra comunidad de trabajo, amistad, relaciones, entonces tendremos varios meses de pugna interna y rupturas dolorosas.


Marte estará en Acuario hasta el mes de noviembre, tocará de nuevo tierras capricornianas, pero su mayor diálogo lo genera con el arquetipo del Aguador, de la Visionaria. Valdría la oportunidad con el último eclipse de este año (11 de agosto en Leo) hacer una limpieza profunda de los temas que nos han acontecido en los últimos seis meses, y también, entender con claridad, ¿qué tema se detonó desde agosto de 2017 en torno a la autonomía, el amor propio, la comunidad, la expansión, la necesidad de seguir la voz del corazón, la autoridad y los límites saludables?


Vamos a preguntarnos: ¿En dónde comencé a perderme en agosto de 2017? ¿Dónde comenzaron «mis dolores de cabeza»? ¿Qué área de mi vida me está pidiendo «hacerme cargo»?

Es posible que durante este inicio retrógrado de estos planetas tengamos la sensación de «no avanzar» en los temas de nuestra vida que ya se mencionaron. Esto es importante hacerlo consciente, porque de este modo podemos darnos cuenta cómo es que nos reafirmamos en la vida, desde qué lugar lo hacemos… ¿cómo se encuentran nuestros impulsos creativos y volitivos? ¿cómo se encuentran nuestras estructuras? ¿cuánto hemos cambiado desde 2016?¿cuáles han sido esas importantes decisiones que hemos tomado desde entonces, y será que aún las honramos? ¿O aún hay decisiones importantes que tomar?

Este movimiento hacia atrás que estos dos planetas realizan en un corto lapso, y que nos da la oportunidad de encontrar nuestro ritmo y repensar si vamos en dirección -y en intención- correcta, son una gran bendición si elegimos retrogradar con ellos a consciencia.

MERCURIO EN LEO: EL MENSAJE DE LA REINA

Mercurio retrograda tres veces en un año gregoriano, cada vez que lo hace nos invita a caminar hacia atrás durante tres semanas, mismas en que podemos revalorar, reacomodar, revisitar, recapitular, reparar y resignificar las experiencias que vamos vivenciando. Esta vez en el arquetipo de Leo, que nos ha invitado desde agosto del año pasado a revisar nuestra relación con nuestro poder personal, autoridad, autenticidad, autonomía, niña interior y adulta consciente.

El Nodo Norte de la Luna (Misión de Vida e impulso colectivo) se encuentra en Leo, casi retirándose… y desde ahí es que se han pulsado tres eclipses en este año. El último en Leo será en enero de 2019, hasta entonces tenemos para elaborar nuestros temas con respecto a nuestra verdad del corazón y el cultivo de nuestra reina interna. Los nodos lunares son puntos específicos en el cielo que nos ayudan a mirar colectivamente las memorias, herencias y nuevas visiones que nos toca cultivar para seguir evolucionando.

Podemos preguntarnos ¿Quién soy yo como reina de mi vida? ¿Estoy en paz con mi niña interior? ¿O reclamo a todos a mi alrededor que la miren, la nutran, la cuiden porque de pequeña no lo recibió? ¿Esta niña interior está en paz con la mujer adulta? ¿Soy soberana de mi vida o entrego constantemente mi poder? ¿A quién le entrego mi poder personal, cómo lo hago, qué me cuento? ¿He aprendido a poner límites? ¿He diferenciado entre la ira y el enojo sagrado?

Si sé y reconozco que me he permitido sentarme en mi poder personal y ser Reina de mi Vida, puedo preguntarme ¿Doy en confianza? ¿Pierdo mi tiempo siendo generosa con personas que no saben cuidar de si mismas y por tanto me exigen que las cuide? ¿Pierdo mi energía con personas que solamente desean pelear y tener la razón, en lugar de cocrear un diálogo creativo? ¿Pierdo energía al intentar cubrir las necesidades de tod@s? ¿Soy la causa de mi vida? ¿He aprendido a decir NO cuando es necesario, sin sentirme culpable?

En este periodo retrógrado Mercurio nos invita a repensar estas preguntas y a seguir trabajando internamente para pulir nuestras enseñanzas con este arquetipo que nos cuesta tanto porque usualmente hemos aprendido a ceder nuestro poder, a ser autoritarias desde el ego, a no poner límites para ser niñas buenas, a no enojarnos, o enojarnos hasta lograr un desastre en nuestras relaciones o a emitir enojos pasivo-agresivos.

Tenemos estas semanas para re-capitular, re-parar y reinvindicarnos. Y luego, cerrar el aprendizaje que este eje Leo-Acuario nos han invitado a mirar.

Será necesario entonces, reflexionar y repensar todo proyecto que estemos por empezar o que lleve poco tiempo de inicio, y considerar cómo lo estamos tejiendo, ¿desde qué impulso? ¿desde cuáles creencias? Muchos de nuestros ideales pueden verse cuestionados, y será importante que estemos alertas y conectadas con nuestro sabio corazón.

Podemos mirar que esta marcha hacia atrás de dos grandes impulsos representa una gran oportunidad para recapitular, ofrendar y re-educarnos, apelando a estar conscientes de lo que se va moviendo en nuestro interior y a nuestro alrededor. Recordemos, que todo movimiento interno y entrega siempre se vuelve a los bancos de memoria colectiva, logrando la masificación de un nuevo despertar.

Somos las creadoras de nuestra vida, somos nuestra causa, tenemos el derecho de cuidar de nosotras siempre, hablarnos con compasión y llevarnos en amor por el camino de la impecabilidad.

¡Que esta próxima Luna Nueva en Leo nos corone el rugido sagrado del león en el corazón!

Karina Falcón

Creadora de La Mujer Lunar

[Luna Nueva y ECLIPSE en LEO] – Un lenguaje de simplicidad y compasión tomado del blog de La mujer Lunar


Leo

Leo es el poder del corazón, la verdad personal, la niña interna herida y también sana, el autocuidado radical y profundo, la alegría de darnos lo que necesitamos sin exigir nada afuera. Leo es la alegría del corazón y la voz de la compasión … ¿Qué hemos aprendido acerca de cómo nos relacionamos? ¿Hemos entendido lo que necesitamos dejar de exigir afuera para darnos-lo desde adentro de nosotras? ¿Nos hemos asumido reinas de nuestra propia vida? ¿Hemos explorado con verdad nuestras formas codependientes de vincularnos? ¿Estamos dispuestas a soltarlas?

La codependencia es un modo de vincularnos destructivo y adictivo, que nos pide «dejar de ser» o «ser» porque sentimos que el otro nos lo pide, y a su vez, nosotras pedimos al otro que haga lo mismo… «por amor». «Si me amas… dejarás de ser tú, y te convertirás en lo que yo quiera y necesite» es la frase que puede describir la profundidad del dolor que llevamos dentro. Porque no es que deseemos ser codependientes y tender nuestros lazos afectivos de maneras enfermizas, es que así nos adiestramos desde pequeñas que ahora, no sabemos cómo es vivirnos de forma saludable en nuestras relaciones con todos y con el todo.

Desde muy pequeñas aprendimos a justificar e incluso, cuidar, las formas compulsivas de nuestros cuidadores… aprendimos a decir sí a los maltratos, manipulaciones y exigencias de «nuestros mayores»… y cuando adultas, continuamos perpetuando estas formas. Aprendimos que si alguien nos ama deberá dejar de ser él mismo o ella misma, y se convertirá exclusivamente de nosotras; aprendimos a mutilarnos para ser amadas, y aprendimos a pedir a los otros que sutilmente se mutilen para poder recibir nuestro amor. Y esto poco tiene que ver con un pacto de amor saludable.

El eclipse del 27 de julio nos confrontó. Y nos hizo preguntas puntuales acerca de cómo nos miramos en nuestras redes y relaciones. ¿Nos conducimos de esa manera enfermiza y la llamamos «amor»? ¿Les pedimos a todas nuestras relaciones íntimas que se mutilen para mostrarnos su amor? ¿Pensamos que los otros son la causa de nuestra felicidad?

Esta Luna Nueva y Eclipse del 11 de agosto nos pide ahora HACERNOS CARGO, y desde ya cortar lazos no saludables, liberar la autocrítica y dar paso a un lenguaje de afecto y compasión con respecto a nosotras mismas y a nuestras relaciones.

LA EXIGENCIA Y LA SIMPLICIDAD

Exigir implica que hemos permitido que alguien nos arrebate nuestro poder personal, hemos caído en la ilusión de haber sido robadas o traspasadas en nuestros límites personales. Entonces exigimos lo que sentimos «no tenemos». Exigimos tiempo, amor, cariño, mirada, ser tomadas en cuenta, ser respetadas, ser apreciadas… Y no nos damos cuenta que toda exigencia habla más de nosotras que de las otras personas o sistemas a quienes exigimos.

Esta Luna Nueva y Eclipse en Leo nos pide elevar un nuevo rezo de autocuidado. Nos pide colocar límites adecuados en tiempo adecuado para evitar sentirnos humilladas o sobre-pasadas. Este eclipse nos llama a la SIMPLICIDAD.


Mercurio Retrógrado en conjunción con la Luna y Sol, nos pide preguntarnos con total honestidad: ¿Por qué necesito tejerme con muchos proyectos y pensamientos? ¿Por qué necesito saturarme? ¿Por qué no soy coherente con mi palabra? ¿Por qué digo «adiós» hasta que estoy en el hartazgo, hasta que fui lastimada -sobre todo por mi? ¿Por qué continuo vinculándome con personas que hablan a mis espaldas? ¿Por qué no expreso con transparencia lo que necesito? ¿Por qué hago explotar mi mente y mi palabra?


Este eclipse nos pide cultivar una nueva forma de amor, y nos invita a:

– Poner límites amorosos, porque cuando un límite sale del corazón no puede ser tomado como «un capricho», porque tenemos el derecho sagrado de poner límites que custodien con belleza nuestra energía, tiempo y espacios.

– Soltar la ansiedad por complacer a los otros, dando siempre de más para poder obtener la mirada, la calificación, la aprobación externa.

– Cultivar falsas expectativas hacia los otros, pensando que si nos aman necesitan forzosamente cumplir con las promesas que hemos imaginado de su parte.

– Permitirnos estar en paz con todo lo que no podemos controlar, permitir que lo espontáneo agregue una chispa de sabor a la vida a cada momento.

– Hacerle saber a los otros como deseamos ser amadas, y de inicio, hacerlo con el ejemplo de amarnos a nosotras mismas como queremos que otros lo hagan.

– Dejar nuestra ayudadora compulsiva a un lado. Y elegir apoyar y acompañar solamente cuando se nos pide hacerlo.

– Dejar el drama y permitirnos contactar con el equilibrio de la vida y con la aceptación paulatina de que el mundo es espontáneo, de que «siempre» significa sólo por hoy.

– Respetar a los otros, permitir que el otro o la otra florezca en su máxima grandeza mientras acompañamos y nos damos permiso también, de florecer así.

– Recordar que nunca estamos solas si estamos con nosotras mismas siempre, que la soledad nunca es sinónimo de desolación.


Este Eclipse y Luna Nueva en LEO nos pide eliminar los elementos innecesarios en nuestra vida y bienestar. Quedarnos con lo esencial y lo vital para poder continuar. Elegir la simplicidad.

¿Qué es lo esencial para nuestra vida y bienestar? ¿Cuáles son los lazos de amistad que sí son vitales? ¿Cuáles lazos están de más? ¿Cuáles experiencias cotidianas nos aportarían energía y alegría? ¿Cuáles nos drenan la creatividad y energía? Si eliges hacer lo que estás haciendo, ¿cuál sería la forma más sencilla de hacerlo y la que te proveería de mayor gozo? ¿En verdad necesitamos agregar todos esos cursos, talleres y experiencias en los próximos seis meses, para poder «ser»?

Si no es así. Entonces, sabemos muy bien lo que necesitamos soltar para cruzar este portal.


Hoy, antes de cruzar el eclipse vamos a preguntarnos ¿Qué está de más en mi vida? ¿Qué está de más en mi hogar? ¿Guardo ropa y zapatos que no me quedan o ya no uso? ¿Qué está de más en mi trabajo? ¿Tengo pilas de hojas y material que hace más de seis meses que no ocupo? ¿Agendo en mi tiempo más actividades de las que desearía? ¿Estas actividades me saturan o me energizan? ¿Cuántas palabras y pensamientos negativos acerca de mi y de mi vida me digo a diario? ¿Ocupan mi voz las palabras que desempoderan? ¿Cuántas cosas artificiales y no esenciales ocupan mi alacena y mi vida? ¿Cuántas cosas pienso que puedo hacer al mismo tiempo y en la misma semana? ¿Cuánto espacio dejo para el reposo y la creatividad?


Con este eclipse damos paso a un periodo de seis meses que cerrará con el eclipse del 21 de enero de 2019 un proceso de encuentro con la voz de nuestro corazón, soberanía, amor propio y rugido sagrado. En estos últimos meses tenemos la oportunidad de vivir lo que hemos soñado con respecto a la simplicidad, a los límites amorosos y el nuevo rezo de interdependencia entre nuestras relaciones.

Tenemos seis meses en los cuales podemos poner en práctica lo que hemos reconocido que necesitábamos para ser reinas de nuestra propia vida y corazón.

Respiremos, simplifiquemos, amemos con poder. Este portal nos espera con su luz máxima para poder elevar en amor el rezo nuevo.

Karina Falcón

Creadora de La Mujer Lunar