Mes: febrero 2019

Porqué es tan difícil muchas veces llevar a la práctica esta actitud?

Qué parte nuestra es la que dificulta ese proceso necesario y liberador para sanar… para estar en el presente? se opone a nuestra actitud que nos lleva  a la terapia, a buscar soluciones…(allí actúa la fuerza de querer superarnos) pero sin embargo hay muchas veces una fuerza que se le opone y lo hace difícil…esa fuerza proviene  de nuestros aspectos no sanados e integra la carga que traemos desde el pasado y especialmente la infancia. Depende la corriente o enfoque se lo llama de diferentes nombres: nuestro niño interno, el aspecto de niño, el guión de vida,etc: es la resistencia a liberar los contenidos dolorosos de una vez por todas.

Cuando aceptamos lo que nos toca , no tenemos que luchar ni lidiar más con nada;uestro sufrimiento termina y comienza un camino nuevo, el de la aceptación, el de la paz, el camino del crecimiento, el camino del adulto. Pero somos niños tan  heridos a lo largo de la vida y estamos tan acostumbrados a llevar esa mochila cargada de dolor que no sabemos como actuar sin ello, no tenemos ni idea de como ser adultos. Entonces frente a la idea de aceptar lo que nos toca o lo que nos tocó cuando se trata del pasado , sentimos la derrota antes de comenzar. Es necesario que desde nuestra mirada de adultos ,de esa que nos lleva a buscar la solución podamos comprender que no es en el ahora donde está la resistencia sino en esos dolores que cargamos y todavía están vigentes , abrazar a ese aspecto de niño para que se sienta seguro y a salvo de que el paso que vamos a dar nos libera a los dos para  elegir la vida en lugar de la muerte, el alivio en lugar del sufrimiento, la paz en lugar del odio .

Es difícil sin saber vivir de esta manera, optar por hacerlo pero es el camino más liberador , la aventura más extraordinario que podamos emprender por nosotros mismo, es el viaje que nos lleva  a todas las opciones posibles para el bienestar, para ser felices ;es una deuda con nosotros mismos , porque solamente en el ahora es donde podemos reparar el daño que ya fue y allí , los cambios comienzan a suceder, la paz del alma comienza a ser realidad y nuestra mirada dejar de ser la  mirada de un niño enojado o triste a la mirada de un adulto compasivo, presente y responsable de sí mismo

Aceptar lo que nos toca es un salto cuántico, es abrir las alas y volar , no en caída libre sino hacia un horizonte que no tiene fin porque está lleno de posibilidades.

 

Lic Roxana D’Angiola

Psicología para el Alma

 Psicoterapia Integrativa Consciente

y Nuevas Constelaciones